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El informe anual de la Defensoría del Pueblo destaca que el proceso de construcción de escenarios participativos de las naciones y pueblos indígena, originario-campesinos, se ha distorsionado totalmente por la contaminación de intereses políticos al interior de sus comunidades, ayllus, markas y suyus.

Asegura también que el ejercicio de los derechos de los indígenas originarios y campesinos a cinco años de su reconocimiento en el actual texto constitucional, se halla aún invisibilizado en las políticas públicas del nivel central, departamental y municipal.

Observando esta realidad la representación departamental de la Defensoría del Pueblo, realizó acciones concretas con esta población, específicamente en el tema de seguimiento a la práctica de sus formas propias de administración de justicias sujetas a la normativa constitucional y la Ley 073 de Deslinde Jurisdiccional.

Durante la gestión se ha trabajo en encuentros al interior de sus organizaciones, particularmente con el suyu Jatun Killakas, Asanajaqis, que involucra a tres provincias concretas del Sur del Departamento: Eduardo Avaroa, Sebastián Pagador y Ladislao Cabrera.

Además se facilitó y promovió espacios de diálogo intercultural entre operadores de la justicia ordinaria y la Justicia Indígena, Originaria y Campesina, para la plena vigencia del pluralismo jurídico, con la participación de vocales del Tribunal Departamental de Justicia y el Ministerio Público así como la identificación de dificultades y avances del tema. En diferentes reuniones, la Defensoría expresó su preocupación por actos irregulares en la práctica de la justicia por autoridades originarias, que de manera recurrente han ido vulnerando derechos y garantías constitucionales, así como las acciones de violencia de las cuales son objeto particularmente adultos mayores y mujeres, quienes son privados y coartados en el ejercicio del derecho a la tierra, cuya vulneración afecta otros derechos, toda vez que sus economías se sustentan en la producción agrícola.

"Va a ser muy importante continuar incidiendo en estas acciones que realiza la Defensoría del Pueblo, donde también es importante remarcar las acciones realizadas a favor de las naciones y pueblos indígenas de alta vulnerabilidad, siendo identificados histórica y ancestralmente como tales a los pueblos urus del lago Poopó y los Uru Chipaya. Cada uno con diferentes contextos, realidades y problemáticas propias que motivaron nuestra intervención", refiere el informe anual de la Defensoría del Pueblo