El presidente Hugo Chávez recibió la bienvenida como nuevo miembro del Mercado Común del Sur, en una cita extraordinaria ayer en Brasilia a la que asistieron sus colegas de Brasil, Dilma Rousseff; de Argentina, Cristina Kirchner, y de Uruguay, José Mujica.
Rousseff, quien ejerce la presidencia pro témpore del grupo creado en 1991, saludó la adhesión de Venezuela en medio de la crisis internacional, y dijo que su inclusión convierte al bloque en una "potencia energética y alimentaria mundial.
"Considerando los cuatro países más ricos del mundo, Estados Unidos, China, Alemania y Japón, el Mercosur es la quinta economía (....) La presencia de Venezuela aporta mucho en ese sentido", destacó Rousseff en un discurso ante la prensa.
Chávez, quien se declaró libre del cáncer que le diagnosticaron en 2011, reapareció de buen semblante en su primer viaje desde enero para concretar una aspiración de seis años. Y es que Venezuela -primer productor sudamericano de crudo- ingresó al bloque tras la suspensión temporal de Paraguay, el otro socio fundador, ante la destitución sumaria del ex presidente Fernando Lugo en junio. El Senado paraguayo bloqueaba desde 2006 la adhesión de Caracas.
Paraguay está suspendido del Mercosur hasta los comicios de abril de 2013.
"Más allá de la críticas" de quienes cuestionan el ingreso venezolano "nos interesa muchísimo salir del modelo petrolero, impulsar el desarrollo agrícola de Venezuela (...), el desarrollo industrial", además del turismo, destacó Chávez en el mismo acto.
"El Mercosur es sin duda la locomotora más grande que existe para preservar nuestra independencia y acelerar nuestro desarrollo integral", añadió.
En el mismo acto, la mandataria argentina, Cristina Kirchner, dijo que la inclusión de Venezuela transforma al Mercosur en un "polo de poder".
"La incorporación de Venezuela cierra definitivamente la ecuación de lo que va a ser este siglo XXI: energía, minerales, alimentos, ciencia y tecnología. De las cuatro tenemos" los cinco miembros del Mercosur, señaló.
Lejos de la polémica por la forma en que se concretó el ingreso venezolano, Chávez envió un mensaje claro de su potencial como socio al firmar ayer un acuerdo con Brasil por 900 millones de dólares para la adquisición de 20 aviones comerciales E-190 del fabricante brasileño Embraer.
El acuerdo, que prevé la entrega a fin de año de las primeras seis aeronaves, es el primero que suscribieron los dos países tras el bloqueo estadunidense de la compra de 24 aviones brasileños de combate Supertucanos por parte de Venezuela.
Con el nuevo socio, el producto interno bruto del Mercosur representará 83.2 por ciento del de toda Sudamérica y su población sumará 270 millones de personas (70 por ciento del total de la subregión).
La alta demanda de alimentos y bienes de Venezuela, que importa buena parte de lo que consume, aumenta sensiblemente las opciones de comercio con Brasil y Argentina, grandes proveedores mundiales de alimentos.
Caracas se convertirá oficialmente en socio pleno del Mercosur el 12 de agosto y tendrá hasta 2016 para ajustarse a las reglas comerciales, incluidas las normas, nomenclatura y tarifa externa común. Pero la expectativa de Brasil es que Venezuela inicie antes de 2013 la desgravación tarifaria para el comercio interbloque.